Begonia Solimutata

El nombre "solimutata" significa "cambiada por el sol", y describe a la perfección la característica más notable de esta begonia. Sus hojas, que tienen una forma de corazón asimétrico, suelen ser de un color verde oscuro y uniforme con un brillo metálico. Sin embargo, cuando reciben una buena exposición a la luz, sus hojas más jóvenes pueden desarrollar un patrón plateado o rojizo en el centro. El verdadero espectáculo ocurre cuando la luz incide directamente sobre ellas, haciendo que el follaje cambie de un verde profundo a un tono cobrizo o marrón rojizo con un brillo iridiscente. Este efecto es temporal y efímero, haciendo que la planta parezca un camaleón vegetal. El envés de sus hojas es de un vibrante color rojo o burdeos, lo que añade otra capa de color cuando se la observa desde diferentes ángulos.

Cuidados para una Begonia Solimutata Feliz

A pesar de su apariencia exótica, los cuidados de la Begonia solimutata son similares a los de otras begonias rizomatosas, lo que la hace manejable para jardineros de nivel intermedio.

• Luz: Para que muestre su sorprendente cambio de color, necesita luz brillante indirecta. Un lugar cerca de una ventana orientada al este o al oeste es ideal. La luz directa del sol, especialmente en las horas más intensas, puede quemar sus hojas delicadas. Si la colocas en un lugar con poca luz, el efecto de cambio de color no se manifestará y las hojas se mantendrán de un verde más uniforme.

• Riego: El riego es crucial. Es importante mantener el sustrato ligeramente húmedo, pero nunca encharcado. Deja que la capa superior de la tierra se seque un poco entre riegos. El exceso de agua es el principal enemigo de las begonias y puede provocar la pudrición de las raíces. Utiliza agua a temperatura ambiente para evitar el choque de temperatura.

• Humedad: Como planta tropical, la alta humedad es fundamental para su salud. Si el ambiente de tu hogar es seco, puedes usar un humidificador o colocar la maceta sobre una bandeja con guijarros y agua. Evita rociar directamente las hojas, ya que el agua estancada puede causar manchas o enfermedades fúngicas.

• Sustrato: Necesita un sustrato bien drenado y aireado. Una mezcla para begonias o para plantas de interior con perlita o fibra de coco es perfecta para asegurar que el agua fluya sin problemas.

• Fertilización: Durante la temporada de crecimiento (primavera y verano), puedes alimentarla cada 2-4 semanas con un fertilizante líquido para plantas de interior, diluido a la mitad de la concentración recomendada.

• Poda: Puedes podar los tallos largos para mantener una forma compacta y fomentar un crecimiento más denso.